
PEPA VALERO
Pepa Valero. Fotógrafa
Tuve la suerte de fotografiar a Pepa Valero junto a su inseparable compañero, Cheeto. Desde que comencé en la fotografía, Pepa ha sido una de esas personas que inspiran de verdad, de las que te hacen amar aún más lo que haces.
Mientras tomábamos las fotos, me contó algo precioso sobre Cheeto. Cuando lo adoptó, las cosas no fueron fáciles. “Me lo destrozaba todo”, me decía entre risas. Incluso llegó a pensar en devolverlo. Pero el día que lo subió al coche para llevarlo de vuelta, no fue capaz. Algo en esos ojos le dijo que no podía rendirse. Y no lo hizo.
Ahora, después de cuatro años, Cheeto es más que un perro; es su compañero de vida, su sombra, su cómplice. Capturar esa conexión fue especial, no solo porque admiro profundamente a Pepa, sino porque su historia con Cheeto es una de esas que te recuerdan lo que significa la lealtad y el amor incondicional. Gracias, Pepa, por abrirme tu mundo y confiar en mí para contar un pedacito de vuestra historia.
